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Traspaso Cristina-Macri será en espacio reducido

El traspaso de mando entre Cristina de Kirchner y Mauricio Macri se hará en un espacio reducido el jueves de la semana próxima. El Salón Azul del Senado se encuentra clausurado con su histórica araña descolgada, mientras que las paredes y relieves de la sala están aún siendo restaurados. Hasta ayer no hubo ningún enviado del Poder Ejecutivo Nacional que brindara en el Congreso precisiones sobre la ceremonia que cuenta con un récord de periodistas acreditados de todo el mundo.
El calendario tampoco favorece a la organización que, en lo formal, está a cargo del Honorable Senado de la Nación que preside Amado Boudou. El lunes y martes de la semana próxima serán feriado y el Palacio Legislativo permanecerá cerrado, apenas 48 horas antes de la celebración de la Asamblea legislativa donde Macri recibirá la banda presidencial y jurará como nuevo Presidente de la Nación ante el pleno de los Diputados y Senadores.
El saliente jefe de Gobierno porteño ingresará, como todos los presidentes electos, por la explanada de la avenida Entre Ríos y será recibido por una Comitiva de Honor. El libro de actas, que suele firmar en el Salón Azul, deberá esta vez relocalizarse ya que ese habitáculo se encuentra clausurado. Sólo estará habilitado el Salón Delia Parodi y Pasos Perdidos.
El acto jurídico que convertirá a Macri de civil en Jefe de Estado se consumará en el recinto de la Cámara de Diputados cuando preste juramento. Ayer el presidente de la Cámara de Diputados, el peronista Julián Domínguez, afirmó que «la Constitución prevé que la transmisión de mando sea en el Congreso de la Nación» y no en la Casa Rosada, como pretende el presidente electo, Mauricio Macri. El exintendente de Chacabuco se refería al artículo 93 del máximo ordenamiento jurídico del país: «Al tomar posesión de su cargo el presidente y vicepresidente prestarán juramento, en manos del presidente del Senado y ante el Congreso reunido en Asamblea, respetando sus creencias religiosas, de: «desempeñar con lealtad y patriotismo el cargo de presidente (o vicepresidente) de la Nación y observar y hacer observar fielmente la Constitución de la Nación Argentina».
Mientras tanto, en el bloque PRO de Diputados preparan la estrategia para avanzar en la destitución de los «Alejandros» de Cristina de Kirchner: Alejandro Vanoli, titular del Banco Central, y Alejandra Gils Carbó, jefa de la Procuración General de la Nación. Esta pelea política será prioridad de la agenda legislativa de Macri y se librará durante las sesiones extraordinarias que convocará Macri no bien ocupe su despacho en la Casa Rosada.
Desde PRO, Emilio Monzó, futuro presidente de la Cámara Baja, se mostró conciliador en cuanto a los detalles sobre la ceremonia. La jura debe realizarse en el Congreso pero el macrismo aspiraba a que la toma de mando se realizara en la Casa Rosada. Monzó, para argumentar el pedido de Macri, explicó: «Son usos y costumbres. Si bien es cierto que los últimos dos traspasos se hicieron en esta casa, los anteriores se habían realizado en la Casa Rosada. Y Macri cree que la asunción o el traspaso tiene que hacerse en la Casa Rosada».