Macri agradeció a Cáritas tras la misa peronista en Luján
Mauricio Macri visitó hoy el comedor Sagrado Corazón de Jesús de Cáritas, luego de la tensión que se disparó entre la Casa Rosada y el Episcopado por la misa-protesta que ofició monseñor Agustín Radrizzani en Luján junto a Hugo Moyano y los intendentes del PJ bonaerense.
Acompañado por la ministra de Salud y Desarrollo Social, Carolina Stanley, el jefe de Estado se mostró con el Padre Jacinto. Durante un breve discurso, el líder del PRO enfatizó su agradecimiento «a Cáritas», y además expresó: «Espero que nos ayuden a dar un paso en la dirección correcta, hacia el futuro que queremos y que tiene que ser con más transparencia y equidad». El comedor recibió artículos de bazar, librería y ropa, mercadería recuperada por el Gobierno de contenedores que proviene del contrabando, en el partido bonaerense de Morón.
Moyano, junto a su hijo Pablo, gremialistas opositores al Gobierno, dirigentes políticos y de organizaciones sociales participaron el sábado pasado de la misa denominada «por pan, paz y trabajo» desde la primera fila de un escenario montado en el frente de la emblemática Basílica de Luján. «Si realmente queremos un cambio positivo tenemos que asumir humildemente nuestra sana interdependencia. Pero interacción no es nunca sinónimo de imposición. El futuro de la Nación no está únicamente en manos de los dirigentes: está fundamentalmente en manos de nuestro pueblo, en su capacidad de organizarse para lograr este proceso de auténtico cambio», completó Radrizzani en su homilía. «No nos dejemos robar el entusiasmo. No nos dejemos robar la esperanza. No nos dejemos robar la alegría permanente. No nos dejemos robar la comunidad».
En la semana previa, el titular de Pastoral Social del Episcopado, monseñor Jorge Lugones recibió a Hugo Moyano para dialogar sobre la realidad socioeconómica del país, a pedido del jefe sindical.
Pero, después, y ante el marcado tinte opositor de la acción, desde la Iglesia advirtieron que la Pastoral Social no adhería a la convocatoria de Luján, por lo que se acordó no subvertir el sentido religioso de la misma con discursos críticos. Pablo Moyano, minutos antes de comenzar la misa, afirmó que la convocatoria era «distinta a la que estamos acostumbrados», porque abarca a «diferentes sectores», y deseó que «el Presidente (Mauricio Macri) escuche el mensaje que daremos en conjunto con la Iglesia».
