Guzmán pidió mayores regulaciones al carry trade
El ministro disertó ayer ante la sesión plenaria del Directorio de Comercio y Desarrollo de la Conferencia de Comercio y Desarrollo de las Naciones Unidas para referirse al “Informe 2020 ¿Cómo evitar otra década perdida? Políticas para la recuperación y el desarrollo” publicado por la UNCTAD, el 22 de septiembre pasado.
Guzmán se refirió al proceso de reestructuración de la deuda externa que la Argentina, que concluyó exitosamente el mes pasado, y afirmó que el gobierno argentino “apoya plenamente la idea de una Autoridad Global de Deuda”, propuesta en el Informe de UNCTAD, para asistir a los países que se encuentran en “situación de deuda insostenible” a la hora de encarar esos procesos.
“Es un informe excelente que aborda los problemas clave que enfrenta la economía global en la actualidad. Proporciona un análisis serio, sólido y técnicamente preciso del estado actual de la economía mundial. No solo aborda el presente, sino que también brinda una perspectiva para el futuro que se basa en una comprensión adecuada de los desafíos históricos que enfrentamos. Se toma la situación de emergencia en los países en desarrollo con seriedad y sensatez, por lo que creo que es un Informe que los responsables políticos de todo el mundo deben tener muy en cuenta”, afirmó el Ministro.
Respecto del impacto de la pandemia a nivel global, el ministro hizo hincapié en que el informe de la UNCTAD deja en claro que el Covid 19 golpeó de manera desigual a los países del mundo.
“Los países cuyas finanzas públicas estaban en el peor estado son los que más sufrieron, porque no tienen los instrumentos para lidiar adecuadamente con las consecuencias del Covid-19”, remarcó, e insistió: “Las consecuencias del Covid son desiguales. Hay un aumento de la desigualdad en todo el mundo y hay consecuencias desiguales, instrumentos desiguales para enfrentar el shock que estamos viviendo”, explicó.
En esa línea, Guzmán señaló que “es fundamental que exista una gestión activa del Estado, tanto en el frente de la demanda como en el frente de la oferta, para impulsar la recuperación económica”. “Esto requerirá espacio en las finanzas públicas para impulsar activamente políticas de recuperación económica, y esto también significa que los países que se encuentran en situaciones de deuda insostenible tendrán que definir prioridades y tendrán que pasar por un proceso de reestructuración de la deuda si desean tener ese espacio para poder hacer lo que sea necesario”, dijo.
Por otra parte, el Ministro sostuvo que el gobierno argentino “apoya plenamente la idea de una autoridad global de deuda”, y recordó que si bien el país “logró finalizar una reestructuración que activó casi todas las Cláusulas de Acción Colectivas y hubo una aceptación al final del 99.01% del stock de deuda que tuvimos que reestructurar, no será tan fácil para otros”.
“El de Argentina fue un proceso de duras negociaciones en las que el Gobierno tomó una postura muy firme, en el sentido de que se debía respetar la premisa de sostenibilidad de la deuda. El FMI jugó un papel positivo, produjo un análisis serio de sostenibilidad de la deuda que fue importante para el proceso de reestructuración. Pero no todos los países del mundo tienen los mismos recursos, ni la misma capacidad para atravesar este proceso de la manera en que nosotros lo logramos atravesar”.
“Si bien las CACs ayudan, no son suficientes. Lo que es esencial es que exista un sistema que conduce al reconocimiento y respeto de las limitaciones de sostenibilidad de la deuda y hoy no tenemos tal sistema. Durante años se han propuesto diferentes ideas en esta línea, ha habido algunos avances pero no muchos y hoy sí nos enfrentamos a una situación sin precedentes y el mundo debe estar a la altura del desafío. La autoridad global de la deuda es una propuesta que es ambiciosa en el sentido de lo que tenemos hoy, pero es seria, es lo que el mundo necesita, por eso Argentina apoya plenamente esa propuesta”, sostuvo.
Guzmán también se refirió a “la importancia” de contar con “regulaciones macroprudenciales” que proporcionen estabilidad a la economía global para enfrentar las crisis. “Los movimientos de cartera a corto plazo pueden conducir a una volatilidad excesiva del tipo de cambio que puede socavar el funcionamiento del sistema económico, las perspectivas de crecimiento y la estabilidad en general, por lo que es fundamental que las economías de todo el mundo adopten regulaciones macroprudenciales para evitar procesos de carry trade que generen una excesiva inestabilidad a nivel interno y también evitar que esta inestabilidad genere contagios y externalidades hacia las otras economías del mundo”, explicó. Y agregó: “Contar con un sistema en el que se garanticen las regulaciones macroprudenciales será fundamental para la estabilidad de la economía global”, señaló.
“Quiero concluir afirmando que el informe de la UNCTAD de este año es muy valioso. Es esclarecedor, tanto en términos de comprensión del presente como de imaginar un camino a seguir para un futuro sostenible. Todos enfrentamos una enorme responsabilidad. Todos tenemos que estar a la altura del desafío. Animo a todos los responsables políticos, profesionales y académicos de todo el mundo, a la sociedad civil, a que tomen el informe en serio y participen en un debate significativo sobre su análisis y sus propuestas”, finalizó.