Macri comió asado en un templo peronista

Ícono político del peronismo y búnker kirchnerista de Guillermo Moreno, el Mercado Central es ahora un objetivo de Cambiemos. Mauricio Macri incursionó en el predio de La Matanza y compartió un asado con los trabajadores en el municipio con mayor peso electoral del conurbano bonaerense.

La Matanza es el principal bastión peronista de la provincia de Buenos Aires. Allí manda Verónica Magario en tándem con Fernando Espinoza, actual diputado nacional por Unidad Ciudadana alineado con Cristina de Kirchner. Espinoza viene de sufrir la rebelión de los intendentes del PJ bonaerense que lo desplazaron de la jefatura del partido para ubicar allí al dialoguista Gustavo Menéndez (Merlo) y a Fernando Gray (Esteban Echeverría).

El Presidente aprovechó el aislamiento de Espinioza dentro del peronismo bonaerense para exhibir la puesta en valor, en el marco de un plan de infraestructura que abarca mejoras para el área operativa, y luego compartió un asado con puesteros, empleados y proveedores. De la comida participaron varios empresarios y también César Fabián Miguelez, representante del Gobierno en el directorio de la Corporación del Mercado Central

Los trabajos emprendidos por el Gobierno Nacional, con aportes de la secretaría de Comercio del Ministerio de Producción, incluyen la repavimentación, bacheo y demarcación horizontal. El Mercado Central de Buenos Aires es un ente conformado por los gobiernos Nacional, provincial y de la Ciudad de Buenos Aires, que comercializa por año casi un millón y medio de toneladas de frutas, verduras y hortalizas para abastecer a 12,5 millones de personas.

Después de incursionar en La Matanza, Macri se reunió  con el jefe de la cartera de Educación, Alejandro Finocchiaro, el dirigente que Cambiemos apuesta instalar para desplazar a Magario de la intendencia en 2019.