Presupuesto 2019 ajusta también a la infancia
El presupuesto para la Secretaría Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia para 2019 sufrirá una reducción, en términos reales, del 34,55%. Según el proyecto oficial, el Programa de Promoción y Asistencia a Espacios de Primera Infancia (N°47), que atiende el período de vida entre los 45 días y los cuatro años, sufrirá una reducción del 75,27% en términos reales (este programa ya evidencia niveles de subejecución en 2018: al mes de octubre sólo se gastó el 41,31% de los recursos asignados en el presupuesto vigente).
En el Programa 17 del Ministerio de Salud y Desarrollo Social, de Atención de la Madre y el Niño, la disminución del presupuesto proyectado para el ejercicio 2019 es, en términos reales, del 67,07%.
En materia de infraestructura y equipamiento escolar se proyecta una reducción de un 77,1% en términos reales: la desinversión en infraestructura escolar afectaría así a 49.457 alumnas y alumnos de la República Argentina. Se equiparían 3.953 aulas menos que en el año anterior y se construirían 1.543 aulas menos (en metros cuadrados, serían 359.064 menos que el año anterior).
En cuanto al fortalecimiento edilicio de jardines de infantes de infantes, la comparación entre el presupuesto aprobado en 2018 y el proyectado para 2019 arroja una reducción del 69,06% en términos reales.
Análisis sobre regresividad en materia de infancia y adolescencia en el proyecto de presupuesto 2019
1. EDUCACIÓN
a) Infraestructura escolar
En la República Argentina, la financiación del Sistema Educativo Nacional es responsabilidad concertada y concurrente del Estado Nacional y las provincias. En ese marco, el Estado Nacional debe dotar a las escuelas de los recursos materiales necesarios para garantizar una educación de calidad, lo que incluye infraestructura y equipamiento. A través del Ministerio de Educación, la Nación transfiere fondos para ese fin (construcción de nuevos edificios, ampliaciones, refacciones, adquisición de equipamiento áulico, informático y de comedores escolares, provisión de servicios básicos, etcétera).
En el proyecto de Presupuesto 2019, el Programa de Infraestructura y Equipamiento Escolar N°37 del actual Ministerio de Educación, Cultura, Ciencia y Tecnología, destinado a estos fines sufrió una importantísima reducción respecto del presupuesto asignado y vigente de 2018. Para realizar la comparación, corresponde actualizar los montos de 2018 según la inflación promedio de 34,8% contemplada por el Poder Ejecutivo en el Presupuesto 2019. Si se actualiza de esa manera, resulta que el monto contemplado para este programa en el presupuesto vigente de 2018 (con modificaciones del Poder Ejecutivo) es de $11.429.127.974.
En el proyecto de Presupuesto 2019, la previsión para el mismo programa es de sólo $2.614.764.375. En consecuencia, en materia de infraestructura y equipamiento escolar hay una reducción de un 77,1% en términos reales. Este porcentaje de ajuste alcanza el 79,12% si se compara el proyecto actual con el monto que el Poder Legislativo previó para 2018 mediante la Ley de Presupuesto N°27.431, que era de $12.523.913,871 en términos reales.
Cabe mencionar, además, que al mes de octubre solo se ejecutó el 29% de los recursos asignados para este año.
El Proyecto revela el impacto que las drásticas reducciones tendrían, de ser aprobadas sin cambios, en las metas previstas para 2019: en el próximo ejercicio fiscal, se proyecta equipar 3.953 aulas menos que en el año anterior y construir 1.543 aulas menos. En metros cuadrados, se proyecta construir 359.064 menos que el año anterior.
Según los últimos parámetros básicos de construcción de escuelas aprobados por el Consejo Federal de Educación, en promedio debería asignarse una superficie mínima de terreno de 7,26 mts2. por alumno/a. Ello permite inferir que, como mínimo, la desinversión en infraestructura escolar afectará a 49.457 alumnas y alumnos de la República Argentina.
b) Fortalecimiento edilicio de jardines infantiles
El Ministerio de Educación de la Nación desarrolla acciones para ampliar la cobertura de de jardines de infantes de 3 a 5 años en todo el territorio nacional. En ese contexto, se realizan transferencias para la construcción de edificios para nuevos jardines y/o salas, o también para ampliar, refaccionar, y/o mejorar los establecimientos ya existentes.
En el Presupuesto 2019, para el programa número 46 de Fortalecimiento edilicio de jardines infantiles, se prevé un monto de $2.528.908.717. La suma aprobada en 2018 para la misma partida fue de $6.063.283.628 en términos nominales, que representa un total de $8.173.306.331 en términos reales. La comparación entre el presupuesto aprobado en 2018 y el proyectado para 2019 arroja una reducción del 69,06%% en términos reales.
Como en el programa anterior, durante el curso del ejercicio fiscal 2018 hubo reasignaciones sustantivas de la partida originalmente aprobada por el Congreso, que ascendía a $6.063.283.628 y terminó en $5.945.836.927. Además, a menos de tres meses del cierre del ejercicio, el Poder Ejecutivo apenas gastó un 25,55% de la partida asignada a jardines infantiles durante 2018, pues se observa un nivel de subejecución del 74,45%, en términos reales.
Por lo demás, el previsible impacto de las reducciones previstas en este aspecto se demuestra en la comparación de las metas e indicadores planificados en cada año. Así, en el año 2018 se proyectó aumentar la capacidad del nivel inicial en un 40%, mientras que en 2019 se prevé hacerlo en un 23,34 %. En la misma línea, se planifica construir 768 aulas en 2019, es decir, 2.275 aulas menos que las proyectadas el año pasado. Por su parte, la cifra de metros cuadrados de construcción cae de 287.853 en 2018, a 111.297 en 2019.
2. NIÑEZ, ADOLESCENCIA Y FAMILIA
La Secretaría Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia (SENNAF) se encarga de implementar las políticas públicas federales en materia de derechos de la infancia y adolescencia. Esta dependencia se financia a través de una partida general, común a todos sus programas (Programa N°. 4 del Presupuesto del Ministerio de Salud y Desarrollo Social, de Actividades Comunes a los Programas 44, 45, 46 y 47), y mediante partidas específicas asignadas a cada uno de esos programas.
El monto global presupuestado para la SENNAF en 2018, que surge de la suma de todas las partidas a su cargo, fue de $3.475.444.924; pero el presupuesto vigente disminuyó a $3.107.240.603. En 2019, el total de lo previsto para todos los programas es de $3.066.414.363, lo que implica una reducción de más de 400 millones de pesos con relación al presupuesto aprobado por el Congreso en 2018 para la SENNAF, en términos nominales. Ahora bien, si se actualiza lo asignado en 2018 de la forma previamente señalada, la suma alcanza los $4.684.899.758. Por consiguiente, el resultado de la comparación con lo previsto para 2019 revela que la reducción, en términos reales, es del 34,55%. En relación con el Presupuesto vigente en 2018, la disminución de la partida prevista en 2019 alcanza el 26,79%.
La disminución presupuestaria resulta más importante al ver el detalle de cada partida. Así, se advierte una reducción presupuestaria del 25,41% en términos reales para el Programa 4 de Actividades Comunes a los Programas 44, 45, 46 y 47. En el Programa 44, de Acciones para la Promoción y Protección Integral de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, la reducción llega al 21, 45%, también en términos reales. Este programa está a cargo de acciones tales como el acompañamiento para el egreso de jóvenes sin cuidados parentales, políticas federales destinadas a adolescentes en conflicto con el sistema penal, el Programa de Acompañamiento a Familias en la Crianza de Niños -Primeros Años-.
La situación del Programa de Promoción y Asistencia a Espacios de Primera Infancia (N° 47) merece mención especial: el período de vida entre los 45 días y los cuatro años es la base de la salud física y mental de niñas y niños, y también de su seguridad emocional, su identidad cultural y personal, y del desarrollo de sus aptitudes. A través del Programa 47 se desarrollan acciones que promueven y fortalecen espacios de cuidado y abordaje integral de niñas y niños de 45 días a cuatro años, donde se proveen servicios de atención y prevención sanitaria y se satisfacen necesidades nutricionales.
El Poder Ejecutivo previó para este programa en 2019 una partida sustancialmente menor que la aprobada en 2018. En efecto, la suma prevista para 2019 es de 510.062.448, mientras que la partida aprobada por el Congreso en 2018 ascendía a $1.530.120.518 en términos nominales, lo que representa $2.062.602.458 en términos reales, si se la actualiza del modo indicado más arriba. La comparación entre la previsión de 2019 y la partida aprobada en 2018 revela una reducción del 75,27% en términos reales.
Cabe agregar que, en el ejercicio 2018, a través de reasignaciones dispuestas por el Poder Ejecutivo, se modificó la partida aprobada por el Congreso para el Programa 47: la suma, que originalmente fue de $1.530.120.518, disminuyó a $1.096.764.936. Además, se advierten previsibles niveles de subejecución, ya que al mes de octubre sólo se gastó el 41,31% de los recursos asignados en el presupuesto vigente, y un 29,61% de los que fueron originalmente presupuestados.
3. ATENCIÓN DE LA MADRE Y EL NIÑO
El programa 17 del Ministerio de Salud y Desarrollo Social, de “Atención de la Madre y el Niño”, tiene entre sus objetivos mejorar la cobertura y calidad de los servicios de salud y las posibilidades de acceso a ellos de mujeres, niñas, niños y adolescentes; reducir las desigualdades entre los indicadores de salud correspondientes a cada uno de los géneros, las distintas áreas geográficas, los niveles socio-económicos, las etnias, etc.; promover un modelo de atención integral fundado en intervenciones efectivas sobre la población de niña y niños menores de 6 años; detectar oportunamente las situaciones de riesgo biológico y social; disminuir la morbimortalidad en niñas y niños en edad escolar; lograr que los niños y niñas en edad escolar del país puedan alcanzar un estado de salud integral que asegure el logro de objetivos educativos y sociales esperados para su edad. En ese marco, el Programa busca fortalecer la estrategia del primer nivel de atención para garantizar el diagnóstico de certeza, tratamiento y seguimiento de los niños en edad escolar, generando acciones comunes entre educación y salud, a nivel central y local, que fortalezcan la promoción integral de la salud dentro de la escuela; identificar tempranamente a la población con patologías graves de retardos en el crecimiento y financiar el tratamiento con hormona de crecimiento a pacientes sin cobertura de salud.
El presupuesto proyectado para 2019 es de $476.247.101, mientras que el aprobado por el Congreso para 2018 fue de $1.784.727.474. Si bien el presupuesto vigente a octubre de 2018 es inferior al original (de $1.498.850.000), aun considerando este monto, la disminución del presupuesto proyectado para el ejercicio 2019, en términos reales, es del 67,07%, y del 71,13% si se considera el presupuesto aprobado por el Congreso para 2018.
4. CONCLUSIONES
El Congreso Nacional deberá cumplir su mandato constitucional de fijar el Presupuesto de Gastos y Recursos para el año 2019 (artículo 75 inciso 8° de la Constitución Nacional). Resulta fundamental que, al hacerlo, contemple los compromisos internacionales y las leyes, en los que adoptó la obligación de garantizar los derechos de las niñas, niños y adolescentes, a través de una asignación presupuestaria acorde y progresiva. En este sentido, el artículo 72 de la Ley 26.061, que regula el financiamiento del sistema de protección integral de los derechos de Niñas, Niños y Adolescentes dispone en forma clara que el Presupuesto anual debe prever las partidas necesarias para el funcionamiento de ese sistema, y que “en ningún caso”, aquellas pueden ser inferiores que lo previsto o ejecutado en ejercicio anteriores. Por consiguiente, el Congreso debe considerar las reducciones que hemos descrito, y prestar especial atención a que el presupuesto asignado a la niñez no disminuya en relación con el año anterior.
Por otro lado, los compromisos internacionales de derechos humanos adoptados por la República Argentina en materia de derechos sociales de las niñas, niños y adolescentes proscriben todo tipo de medida regresiva en materia presupuestaria. En ese sentido, cabe señalar una vez más que en el último examen relativo a nuestro país, el Comité de Derechos del Niño de la ONU hizo un claro llamamiento a que las medidas regresivas producto de la crisis económica sean adoptadas después de evaluar todas las demás opciones posibles, garantizando que los niños, niñas y adolescentes, principalmente quienes se encuentran en situaciones de vulnerabilidad, sean los últimos afectados. El Comité instó a que las partidas presupuestarias de niñez estén protegidas frente a la crisis.
Los compromisos descritos también suponen que, al sopesar las distintas prioridades concurrentes de asignación y gasto presupuestario, las autoridades encargadas de la toma de decisiones en materia fiscal consideren siempre en forma primordial el interés superior de niños, niñas y adolescentes. En ese sentido, cabe advertir que las condiciones en que se asume deuda pública no pueden importar una reducción injustificable de las capacidades estatales para proteger y hacer efectivos los derechos humanos, especialmente de las niñas, niños y adolescentes. Sobre el particular, en su reciente visita al país, la Relatora Especial para la Alimentación de las Naciones Unidas recordó que los recursos públicos deben orientarse a la atención de los derechos humanos antes que otros objetivos fiscales, tales como el servicio de la deuda pública.