Parlasur: Gobierno busca reemplazo para Taiana
Emilio Monzó, jefe de la Cámara de Diputados, avisó que serán reasignadas las partidas presupuestarias aprobadas por el Congreso y destinadas a los representantes argentinos ante el Parlasur. Susana Malcorra no está de acuerdo y prepara una reunión con Luis Florido, nuevo presidente de la comisión de Política Exterior de la Asamblea Nacional de Venezuela. El recambio legislativo en la república bolivariana, consumado la primera semana de 2016 con la asunción de los nuevos diputados, cambiará la composición de ese país en el Parlasur que preside el kirchnerista Jorge Taiana. Con los votos de los nuevos diputados venezolanos, que ahora controlan la Asamblea Nacional con dos tercios de las bancas, el Gobierno nacional buscará desplazar al excanciller de Néstor y Cristina de Kirchner de la presidencia del Parlasur.
La Argentina sucedió en diciembre a Venezuela en la presidencia de este órgano legislativo supranacional que, sin embargo, no legisla. Emite resoluciones y recomendaciones a los Estados miembro (Argentina, Brasil, Uruguay, Paraguay, Venezuela y Bolivia). La presidencia la ejercía el venezolano chavista Saúl Ortega y fue sucedido por Taiana con votos de legisladores venezolanos que respondían a Nicolás Maduro, a pesar de la resistencia de Cambiemos que, vía Mariana Zuvik (Coalición Cívica) y Fabián Rodríguez Simón, alias «Pepín» -longa manu de Mauricio Macri en ese organismo– rechazaron la designación en minoría. Con el cambio de composición de la Asamblea Nacional de Venezuela, ahora dominada por la oposición al chavismo, y a partir del cambio de Presidente en la Argentina, Macri buscará sepultar el denominado «eje chavista» del Parlasur y para eso irá tras los votos de los nuevos representantes opositores de Venezuela en ese organismo.
El primer paso será un encuentro entre Malcorra y el diputado venezolano Florido. Miembro de Voluntad Popular, partido cuyo líder es Leopoldo López -en prisión desde 2015 y condenado a más de 13 años-, Florido anunció que investigará desde la Comisión de Política Exterior de la Asamblea de Venezuela «toda la cooperación internacional» existente entre el Gobierno venezolano y países extranjeros. La primera manifestación de política exterior de Macri había sido la aplicación de la cláusula democrática para apartar a Venezula del Mercosur como castigo por el arresto de López. El recambio legislativo en ese país del norte de América del Sur, y el consejo de Malcorra, apaciguó esa operación. Ahora el Gobierno nacional intentará desplazar a Taiana de la presidencia del Parlasur que volverá a tener una reunión ordinaria en marzo.
Mientras tanto, Taiana intenta convocar a una reunión extraordinaria del Parlasur, que funciona en Montevideo, la capital de Uruguay, para reclamar por la detención de Milagra Sala. De los 43 parladiputados argentinos, la jefa del Movimiento Tupac Amaru es la única detenida. Ni siquiera llegó a jurar su cargo. Ese flanco busca ser explotado por los representantes del Frente Renovador de Sergio Massa en el Parlasur. Durante una reunión en el despacho de Jorge Vanossi, el parladiputado massista Alberto Asseff, anunció que buscará impugnar el pliego de Sala a partir de su detención en Jujuy. Además, y tras la reunión de Macri con el premier británico David Cameron en Davos, cursarán una invitación para que una delegación de kelpers asista al Parlasur. «La invitación será para promover la cooperación con los habitantes de Malvinas en el marco del reclamo indeclinable de la soberanía argentina sobre las Islas. No los invitamos en su carácter auto-definido de británico sino desde el aspecto humano para conocer las necesidades», explicó Asseff.
Taiana y Malcorra ya tuvieron un intercambio epistolar poco amistoso. El diputado del Parlasur había enviado a la Cancillería argentina sobre la detención Sala. Pero el Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto explicó por escrito que «no tiene injerencia en las cuestiones vinculadas a los delitos que se le imputan a la mencionada dirigente política».
Por ahora, los 43 parladiputados de la Argentina no tienen despacho ni presupuesto asignado. Sus oficinas iban a funcionar en el edificio de la Confitería El Molino, pero el cambio de Gobierno congeló los planes.